Ya conocemos que las actividades económicas a nivel mundial se encuentran paralizadas por la pandemia del COVID 2019 declarada el 11 de marzo por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Empresas y negocios emprendedores se encuentran en la transición de decidir entre el cierre o el impulso en la activación económica una vez concluida la medida sanitaria.
El contexto ha generado la pérdida de puestos laborales; así como el posible el quiebre de algunos negocios formales del país, en cifras generales según la organización Internacional del Trabajo (OIT, 2020) los trabajadores informales, que representan alrededor del 61 por ciento de la fuerza de trabajo mundial, en Perú la tasa de empleo informal es de 65,7%, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI, 2018).
Los giros como restaurantes, bares, turismo, hoteles, entretenimiento entre otros de nutrida concurrencia social sufrieron mayor repercusión en sus economías el 2019, según cifras oficiales del sector turismo emplea a 1.45 millones de personas en el Perú que representa el 8% de la Población Económicamente Activa (PEA).
El Gobierno peruano ha anunciado como medida para reactivar la economía nacional el retorno gradual de algunos negocios que se inician el mes de mayo hasta el mes de agosto, en tanto las marca de algunos empredimientos no se encuentran preparados para el retorno. Entonces es necesario plantearnos algunas interrogantes.
¿Estamos preparados para retorno? ¿Cómo se realizará este retorno ? ¿Contamos con las medidas adecuadas para hacerlo? En este contexto no todos volverán al mercado, las exigencias del consumidor y el control del Gobierno estarán como indicadores para un responsable retorno, sin caer en el error de la desesperación y que este melle la imagen y reputación de las marcas.
Esta situación nos obliga a pensar por dónde comenzar; la dinámica en el mercado será diferente, las reglas cambiaron y van necesitar del apoyo y el asesoramiento de especialistas en los temas inherentes a tu negocio, muchos ya empezaron con un proceso de investigación y planteamiento para ajustarse a las nuevas circunstancias.
Es indispensable contar con estrategias, herramientas y protocolos para un retorno con responsabilidad social, que deben tener en cuenta las marcas y no apresurar un ingreso a la ligera. Para el diseño y planificación de estos elementos que permitan volver al mercado se debe tener en cuenta las políticas nacionales y globales que encaminen un negocio seguro.
La publicación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) " Frente a la Pandemia Garantizar la Seguridad la Salud en el Trabajo" menciona elementos referidas al sistema de gestión de la seguridad y la salud en el trabajo (ILO-OSH 2001) que promuevan la adopción de los principales elementos de política, organización, planificación y aplicación, evaluación y acción en pro de mejoras en el lugar de trabajo (OIT, 2001).
Del mismo modo, hace mención en proporcionar información y mantener comunicación interna a nivel de las organizaciones, así como proporcionar información a las autoridades competentes, vecindad y los servicios de intervención en situaciones de emergencia o prevención de las mismas (OIT, 2001).
Aunque las exigencias globales parecen complejas debemos considerar las políticas nacionales, una de ellas es del Ministerio de la Producción dónde las empresas ya puedan tramitar autorización para reanudar actividades vía la plataforma Produce Virtual https://sistemas.produce.gob.pe/#/ y seleccionando la opción administrados, esto en la primera fase de reactivación.
Es indispensable contar con estrategias, herramientas y protocolos para un retorno con responsabilidad social...
Un ejemplo que servirá para la formulación de un plan que considere los elementos básicos para el retorno al mercado, se va necesitar de un diagnóstico previo para determinar las estrategias, revisar si nuestras herramientas están funcionando o requieren de ciertos cambios y adelantos, sobre todo en la adopción de tecnologías; así como salud y seguridad, tener en cuenta los protocolos de comunicación a nivel interna como externa.
Estos elementos primordiales ameritarán una revisión de nuestras acciones a nivel organizacional que se ajusten a un contexto desconocido, pero de constante planificación y medidas de contingencia que puedan sacarnos de una crisis hasta que esto encuentre su normal desenvolvimiento en el sistema.
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